El Reino Animal en la Corporación.

Cuando niña soñé con ser veterinaria, por muchas razones los animales me apasionaban y hoy son fuente de aprendizajes y momentos importantes -incluyendo los no tan buenos-, pregúntenle a un conocido con un cachorro por entrenar.

En la Universidad donde estudié dos años de Sociología y luego tomé el camino de Relaciones Industriales, escuché de algunos de mis profesores y compañeros alguna historia del reino animal para darle fuerza a una teoría o posición.

Mas tarde en el mundo Corporativo, esas historias, repetidas u originales se multiplicaron, para luego ser inmortalizadas en imágenes de Whatsapp, Instagram, Snapchat y en general redes sociales.

Nunca cuestioné estas historias, hasta que recibí aquella de los japoneses que en aras de ofrecer en el mercado pescado fresco, innovaron un sistema para mantener a los peces vivos y alertas hasta su arribo a puerto, introduciendo en sus tanques al menos a un tiburón; cuenta la historia que aún cuando perdían algunos de los peces, los que llegaban lo hacían a la altura de las expectativas de los comensales. A esta historia hoy la acompañan, programas como «Tanque de Tiburones» donde emprendedores tratan de captar entre mordisco y mordisco, la inversión de un tiburón.

Hoy es común escuchar en reuniones de trabajo, frases como: «hay que meter a un tiburón en la pecera», cuando se refieren a la decisión de ingresar a un personaje con «carácter», para fomentar el movimiento, …..y aquí empecé a preocuparme.

En las empresas se conversa cada vez mas, sobre océanos azules versus rojos, sobre compromiso, colaboración, gerencia de bienestar y felicidad y al mismo tiempo de tiburones, que avalan una gerencia desde el miedo, que no la hace sustentable y no se alinea con las tendencias del mundo Corporativo de hoy… podríamos indagar en un milleniall, acerca de como son inspirados por el miedo y prepararnos para escuchar la respuesta y la respectiva reacción.

Me centro en el tiburón porque me parece el ejemplo mas dramático, pero en historias mas gentiles como la historia de la gaviota y vuelo en «V», o los equinos y su liderazgo situacional, me queda la inquietud acerca de la facilidad con la que nos es mas sencillo reflexionar desde el reino animal.

La similitud entre el reino de los animales y el nuestro, es invitacionalmente representativa y por ello tendemos a usarla, al mismo tiempo nosotros las personas, tenemos motivadores mas complejos ; tenemos pensamientos, emociones que se reflejan en nuestras palabras con las que construimos nuestras realidades, con una profundidad de análisis a la que me resisto a renunciar porque nos da claves para entender a cada sujeto de una manera particular, una manera propia de su mundo.

Y en último caso haciendo consonancia entre lo que decimos y hacemos, siempre podríamos haber metido en el tanque o pecera a un delfín y no el tiburón, habría movimiento sin miedo; pero supongo que la historia se hace menos interesante

Mi invitación es que consideres cuando hagas un paralelismo de este tipo, que nuestra conducta es mas compleja, en especial cuando estás tomando decisiones que afectan a tu equipo de trabajo o a uno de sus integrantes y que cuando te venza la tentación, o sea oportuno traerla, te preguntes si la historia apoya el camino hacia tu objetivo o justifica desde lo incuestionable -no podemos preguntarle al tiburón, delfín, gaviota o caballo- tu posición.

 

 

6 respuestas a “El Reino Animal en la Corporación.

  1. Suena paradójico que a diferencia de los animales quienes actúan por instinto y sin uso de la razón, el ser humano dotado de inteligencia superior, trate de imitar conductoras que no le son propias de su genero o intente ejemplificar sus actuaciones con modelos del genero animal.

    Si bien es cierto que los animales no gozan de inteligencia actúan como si gozarán de ella y tiene un orden natural de organización que muchas veces supera al humano. En el reino animal se respeta la jerarquía y los mas experimentados guían al resto, sin haber estudiado, sin consultar libros….

    Te felicito por este primer ensayo y te invito a seguir escribiendo y compartiendo tus ideas.

    Tu amigo y seguidor.

    Luis Conde

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  2. Es un desafío constante que nos pone a prueba. Que el barco salga a flote o se hunda depende de nosotros. Nadie vendrá a rescatarnos en caso de tormenta.

    Por ello, como buen capitán, debemos ser fuertes y determinados en nuestro propósito si queremos llegar a destino: la isla del tesoro, en este caso, tener éxito con nuestro negocio.

    No será fácil. Nada que merece la pena lo es. Pero si seguimos trabajando en ello podemos conseguirlo.

    La motivación no te servirá para sacar adelante un proyecto, no es suficiente. Es la disciplina la que lo hará. Pero, con motivación, las cosas son más fáciles.

    La motivación es como el aceite que echamos en el motor. Con este lubricamos sus piezas y permitimos que sigan funcionando. La disciplina, el trabajo que dedicamos, es la gasolina, aquello que de verdad permite que las cosas se muevan. Mi humilde opinión. Felicidades y éxito con este nuevo proyecto, saludos.

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  3. Todo depende si metes en la piscina un «Tiburón Ballena» ;). De acuerdo en que existen múltiples formas de motivar al equipo sin necesidad de sacar dos filas de 24 dientes cada una ( con solo 2 dientes basta), pero requiere de la capacidad de los líderes para poder inspirar y mover a las personas por una meta común.

    Los ecosistemas son capaces de auto-regularse, en base a déficit o superávit. Habrá que estudiar en el largo plazo qué efecto tienen los 48 dientes en la población y si ese efecto suma hacia lo que se desea lograr tal como lo dices más arriba.

    Aprovecho y dejo un link de una sesión de fotos de una Modelo (que también es paracaidista) con tiburones. No todos son agresivos.

    http://www.quo.es/naturaleza/bailando-entre-tiburones

    Sigue escribiendo…..

    Feliz día.

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  4. Excelente reflexión Sandra ! Podría contarte miles de historias en el area de las ventas y los temibles tiburones … Aquí en US particularmente les encanta hacer esas comparaciones con el reino animal, para ellos ser un tiburón o el rey león es símbolo de éxito y lo comprueban con altos números en ventas … Pero por otro lado tienes empleados cansados, que trabajan más de 14 horas diarias y con cambios en las personalidades. Por eso coincido contigo en que ciertamente estas comparaciones no deben llevarse al límite y que estar claros en los objetivos es fundamental.

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  5. Interesante reflexión Sandra.
    Yo particularmente asocio las analogías con tiburones, grandes felinos y demás depredadores que se encuentran en el tope de la cadena alimenticia con la sagacidad, agilidad y toma de decisiones instantaneas que caracteriza a estos animales y les permite mantenerse en lo alto de dicha cadena.
    Considero que todo líder debe ser un tiburón, pero debe buscar la manera de motivar al equipo desde sentimientos positivos, evitando que la analogía con estos depredadores tenga una connotacion en cierta forma «negativa».
    Felicidades por el blog. Acabas de adquirir un nuevo lector!

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